diumenge, 24 de maig del 2009

Camarada Blasco


Fa 35 anys, Rafael Blasco era membre d'una organització armada d'ideologia maoista pro-albanesa. Ara, com a nou estrateg del PP valencià i del Tío Paco, dóna respostes com aquestes...

P. ¿Tener un presidente imputado por un presunto delito de cohecho es una gran suerte?

R. Sacar la conclusión de que un imputado es un condenado o es culpable es algo que excede del contenido garantista del precepto legal que significa esta figura. Muchas personas han sido imputadas en más de una ocasión y no por eso han sido relevadas de sus responsabilidades.

P. Un imputado con cargos lo es porque hay indicios racionales de que ha cometido un presunto delito.

R. Pero pueden ser documentos falsos, indicios conseguidos fraudulentamente.

P. Sugiere que los documentos son falsos.

R. No sé si son falsos o son ciertos. Son ridículos. Imputar a un presidente de la Generalitat con una base tan inverosimil es sencillamente cutre.

P. O sea que los jueces son unos cutres

R. No. Los jueces no son unos cutres. Los cutres son quienes utilizan una documentación cutre.
P. El que imputa al presidente Camps es el magistrado José Flors. ¿Estamos ante un juez cutre que, en base a documentos cutres, le imputa?

R. No, no. Eso lo dice usted.

P. No. Yo sólo pregunto

(...)

P. Miembros del Consell se han preguntado en voz alta cuánto ha pagado EL PAÍS por obtener la información del caso Gürtel. Mi pregunta es: ¿Cuánto nos cuesta a los valencianos que Canal 9 no haya dicho todavía que el presidente Camps se encuentra imputado?

R. No debe de costar mucho. La gente está encantada con Canal 9.


Entrevista a Rafael Blasco firmada per Josep Torrent. Més ací.

2 comentaris:

aurora ha dit...

Qualsevol dia d'estos li dóna un yuyu al menda. Tanta hiperactivitat mental li passarà factura...

aurora ha dit...

Per cert, crec que en El País del passat 23 de març, també el caracteritzaren de meravella:

"Soy el señor Lobo. Soluciono problemas"

Rafael Blasco, como Harvey Keitel (el señor Lobo en la película Pulp Fiction) siempre aparece como la solución divina en el momento más crítico. La tarjeta de presentación del personaje, especialista en gestionar embrollos muy pringosos, parece hecha a propósito para Blasco: "Soy el señor Lobo. Soluciono problemas".