dijous, 31 de gener del 2008

Moviments insurgents a Xina patrocinats pels EUA


He seleccionat un breu paràgraf especialment interessant de l'assaig del professor d'economia canadenc Michel Chossudovsky, publicat a Rebelión sota el títol 'Al Qaeda y la guerra contra el terrorismo'.

Movimientos insurgentes en China patrocinados por Estados Unidos

También es importante para entender la guerra estadounidense contra el terrorismo, observar la existencia de insurgencias islámicas apoyadas por el ISI [serveis secrets pakistanesos] en la frontera occidental de China con Afganistán y Pakistán. En realidad, varios de los movimientos islámicos de las repúblicas musulmanas de la extinta Unión Soviética están integrados por movimientos turkestanos y uigures de la región autónoma Uigur de Xinjiang, en China.

Esos grupos separatistas –que incluyen a la Fuerza Terrorista del Este del Turkestán, al Partido Reformista Islámico, la Alianza Unida Nacional del Este del Turkestán, la Organización de Liberación Uigur y el Partido de la Yihad Uigur de Asia central- han recibido todos ellos apoyo y entrenamiento del Al Qaeda de Osama Bin Laden (Según fuentes oficiales chinas citadas en UPI, en noviembre de 2001). El objetivo declarado de esas resistencias islámicas en China es el «establecimiento de un califato islámico en la región». (Defence and Security, 30 de mayo de 2001).

El califato estaría integrado por Uzbekistán, Tayikistán, Kirguizistán (Turkestán occidental) y la región autónoma Uigur de China (este de Turkestán) en una entidad política única.

El «proyecto del califato» invade la soberanía territorial china. Apoyado por varias fundaciones wahabíes de los Estados del Golfo, el secesionismo en la frontera occidental china es, de nuevo, coherente con los intereses estratégicos de EEUU en Asia central. Mientras tanto, un poderoso lobby con sede en EEUU estaba canalizando el apoyo a las fuerzas separatistas del Tibet.

Fomentando tácitamente la secesión de la región Uigur de Xinjiang (utilizando al ISI pakistaní como intermediario), Washington está intentando desencadenar un proceso más amplio de desestabilización política y de fractura en la República Popular de China. Además de esas diversas operaciones secretas, EEUU ha establecido bases militares en Afganistán y en varias de las antiguas repúblicas soviéticas, directamente sobre la frontera occidental china.

La militarización del Mar del Sur de China y el Estrecho de Taiwán también es parte integrante de esta estrategia.